​¿Un profe tradicional o un profe tecnológico?

Las TICs han llegado a todos los ámbitos de nuestra cotidianidad, y la educación no es la excepción. Esta es una poderosa herramienta que facilita el aprendizaje y el desarrollo de habilidades a través de actividades interactivas, que permite al alumno aprender de forma más dinámica y por qué no, más entretenida. Los alumnos de enseñanza básica y media, son considerados actualmente “nativos tecnológicos”, y la labor del docente no es mostrarle estas nuevas herramientas (porque ya las conocen), sino enseñarles cómo utilizarlas con un fin más  pedagógico.

Muchos profesores, especialmente aquellos mayores, se resignan y limitan al uso de estas tecnologías, actitud que los estudiantes toman con rechazo innato, ya que los privan de ser partícipe de su contemporaneidad. La utilización de Ppt en remplazo de la pizarra, el uso de jClic en remplazo del papel Craft a la hora de hacer mapas y sopas de letras, World en remplazo a los informes escritos, y sobre todo el Internet en remplazo de las enormes y pesadas enciclopedias, son comunes para los alumnos del siglo XXI.

Si bien, causa nostalgia recordar aquellos tiempo, no todo tiempo pasado fue mejor, y el docente, debe ser capaz de actualizarse, abrir su mente y considerar lo nuevo. Ellos mismos deben reconocerse como portadores y emisores del conocimiento. No es justo que por ideales personales, frustraciones o auto limitaciones se perjudique el aprendizaje completo de los estudiantes.

La amplia gama de programas y aplicaciones permiten que el docente pueda llegar a todos sus alumnos con diferentes estrategias, y ese es el objetivo de la educación, el aprendizaje real. Las TICs vinieron para quedarse, y para facilitar la tarea tanto del profesor como del estudiante, atrévase, seamos partícipe de esta nueva era. 

Riveros, Víctor; Delgado, Mercedes; Arrieta, Xiomara; (2009). Uso de las TIC en educación, una propuesta para su optimización. Omnia, Sin mes, 58-77